Introducción
Todas las alabanzas son para Dios,Enaltecido sea, y que la paz y las bendiciones de Dios sean sobre Su Mensajero Muhammad, y sobre su familia y sus compañeros, y sobre todos aquellos que siguen su ejemplo hasta el Día de la Resurrección.
La palabra “Islam” significa sumisión y entrega a Dios, Uno y Único (según el significado
de esta palabra en árabe), a quien se adora sinceramente sin asociarle copartícipes.
Todos los Profetas, incluidos Noé, Abraham, Moisés, Jesús y Muhammad (P y B) 1 eran musulmanes.
La palabra Islam no significa paz, como se ha dicho muchas veces, a pesar de tener la
misma raíz (SLM) que la palabra “salam”, que sí significa paz. Ciertamente, sólo a través
del Islam el hombre encontrará y establecerá la paz real y absoluta.
Nuestra afirmación que “el Islam es una religión de paz” no significa que los musulmanes
no van a la guerra cuando es necesario defender sus vidas, sus propiedades, su honor
o su fe, ni significa que el Islam acepta una falsa paz o una paz forzada por los sistemas
opresivos que cometen injusticias y persecuciones donde algunos grupos privilegiados
aterrorizan, oprimen y explotan a otros, donde la idolatría y la moral pervertida son
moneda corriente, ya sea por placer o por beneficiar a ciertos grupos o clases sociales
corruptos.
Principios islámicos que disfrutan de la misericordia
El Islam es una religión de paz, misericordia, tolerancia, bondad y benevolencia. Está
en contra de la brutalidad, la violencia sin sentido y los vicios para promover y
proteger la justicia y la paz. Dios, el Más Benevolente, les ordenó a los musulmanes
que siguieran el ejemplo del Mensajero de Dios (
s) en el Sagrado Corán:
“By mercy from Allah, [O Muhammad], you were lenient with them. And if you had been
rude [in speech] and harsh in heart, they would have disbanded from about you.
So pardon them and ask forgiveness for them and consult them in the matter. And
when you have decided, then rely upon Allah. Indeed, Allah loves those who rely
[upon Him].”
(3:159)
Principios generales islámicos de paz
Además, el criminal que no se arrepiente carga con la amenaza del castigo eterno en el
Infierno, una morada permanente llena de humillaciones y torturas interminables,
bajo la Ira de Dios, Todopoderoso. Dios, Sa
“Quien matare a un creyente intencionalmente será castigado con el Infierno eterno.
Incurrirá en la ira de Dios, lo maldecirá y le tendrá reservado un castigo terrible”.
(4:93)
Acciones Que Prohíbe El Islam Para Mantener La Paz
El politeísmo y la idolatría causan inevitablemente conflictos entre los clanes, tribus y pueblos enteros y provocan la competencia por ganar mayor reconocimiento, nivel, dominio y tributo para sus ídolos e ideologías asociadas y mitología. Si toda la gente adorase a Dios, Uno y Único, entonces se podría erradicar la raíz más profunda de la violencia. Dios, Enaltecido sea, dijo: “Y por cierto que a todos los Mensajeros que envié antes de ti (Oh. Muhammad) les revelé que no existe más divinidad que Yo, (y les ordené): ¡Adoradme sólo a Mí!”(43:45) Lee mas +
Lo opuesto a la paz es la guerra, los conflictos civiles y el terrorismo que azotan a la humanidad. De ninguna manera se puede acusar al Islam de librar guerras injustas ni de aprobar el terrorismo cuando el Islam prohíbe categóricamente todo tipo de guerra que sea por competencia imperial, nacional o tribal para conquistar territorio, para dominar o para obtener botines. También prohíbe estrictamente que se ataque a gente inocente, ancianos, mujeres, niños y no combatientes durante la guerra, como se explicará más adelante en este libro.
El término “terrorismo” es usualmente mal usado por los políticos, estudiosos y por los medios de comunicación para lograr sus propios intereses. Como se menciona en las ciencias políticas y en los estudios de relaciones internacionales, un hombre puede ser un terrorista para algunos, y un héroe peleando por la libertad para otros. Muchos temas no son simplemente blancos o negros, como intentan hacernos creer los que tienen intereses creados, sino que existen las zonas grises que abarcan las consideraciones históricas y motivos de reclamo legítimos que justifican ser investigados. Frases como “estás con nosotros o contra nosotros”